Yolanda Olius, Socia de Auditoría

“Me gusta que en mi equipo se incluyan mujeres porque aportan un plus de rigor, entre otras cualidades”.

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Me gustaría destacar de mi trayectoria profesional, más allá de títulos o premios, dos logros que para mí lo resumen casi todo y son: la oportunidad que me ha dado mi Firma de gestionar clientes y liderar, como socia, los equipos de profesionales de auditoría de dichos clientes y, también, la oportunidad de poder asumir la responsabilidad de liderar el departamento de Ética e Independencia, que es fundamental en las Firmas de auditoría y de mayor complejidad en las que se engloban dentro de una Red.

Yolanda, una vida dedicada a la Auditoría. ¿Cómo sientes el desarrollo de tu carrera profesional durante todo este tiempo?

Me siento muy orgullosa de haberme dedicado a esta profesión desde muy joven porque en cada una de las etapas, no sin esfuerzo, se me ha permitido ir adquiriendo formación, experiencia, conocer muchos clientes y procesos de negocio de múltiples sectores, trabajar con profesionales altamente cualificados, de los que siempre aprendes, y sobre todo el contacto diario con jóvenes que se van uniendo a la Firma. Un camino con muchas etapas, pero con continuos retos y satisfacciones.

 

Los aspectos de independencia requieren rigor técnico y mucha actualización. ¿Cómo te has enfrentado a ellos para ser en todo momento un referente en su aplicación en nuestra Firma?

A finales del año 2014 fui nombrada responsable del departamento de Ética e Independencia en Grant Thornton y, desde entonces, ha habido importantes cambios en la normativa que regula la Auditoría en España, con la nueva Ley y el Reglamento que la desarrolla. La implantación de las normas en un Grupo como el nuestro, donde tenemos Red en España y Red Internacional, junto con la alta complejidad en cuanto a su interpretación y a su puesta en práctica, me exige un trabajo constante de estudio y aprendizaje, análisis e interpretación, y he tenido la necesidad de crear y formar un equipo de profesionales que me ayuden a dar asistencia a los equipos de los encargos y a la Firma, en general.

No puedo obviar que cuento en mi aprendizaje con la ayuda de profesionales muy cualificados de la Comisión de Independencia del ICJCE.

 

La importancia de independencia en una Firma es tal que actualmente tú eres la líder de este departamento dentro de Grant Thornton, en el que además te has rodeado de mujeres. ¿Casualidad o es que aportan realmente un plus de rigor?

Estoy convencida de que realmente aportan un plus de rigor y muchas cualidades más. Tanto en los equipos de trabajo que dirijo como socia responsable de la Auditoría, como en mi equipo interno de independencia de Grant Thornton, siempre me ha gustado que se incluyan mujeres porque en general destaco su responsabilidad en el trabajo, dedicación, compromiso, ganas de aprender y desarrollar una carrera profesional, empatía y respeto.

 

¿Crees que las Firmas de servicios profesionales se han adaptado a las necesidades de flexibilidad que necesitan mujeres auditoras para no abandonar la carrera?

Creo que las Firmas de servicios profesionales y, en especial, las Firmas de auditoría son muy conscientes que es necesaria la flexibilización, si bien queda mucha labor por hacer. No es una tarea nada fácil porque, a mi parecer, es necesario establecer una hoja de ruta muy coordinada y consensuada en el sector de Firmas. Si bien desde las instituciones se están imponiendo medidas de flexibilización, hay muchos otros factores en la profesión que complican dicha adaptación. Entre algunos de estos factores podríamos destacar la concentración de trabajos en muy corto espacio de tiempo, honorarios por prestación de servicios demasiado bajos, que complican la rentabilidad en las firmas y, consecuentemente, la contratación de más profesionales, estructuras en las Firmas muy piramidales con proyecciones de carrera muy largas y donde los profesionales están en constante evaluación, etc.

 

¿Cuál consideras que es principal “techo de cristal” de una mujer en la profesión de Auditoría actual?

El principal “techo de cristal” al que llega una mujer en la profesión de auditoría actual suele llegar cuando debe compaginar su profesión con la dedicación a la familia. La dedicación que requiere esta profesión actualmente, tanto en horas como en continuo aprendizaje por las exigencias de las Firmas, dificulta la conciliación y requiere de un gran esfuerzo y sacrificio que muchas mujeres no pueden o no están dispuestas a realizar.

 

A nivel personal, ¿cuán de importante ha sido tu red de apoyo en la tarea de conciliar aspectos profesionales y personales?

Yo siempre he tenido el apoyo total de mi familia, que siempre ha valorado mucho mi trabajo, sin cuestionar mi tiempo y dedicación. Soy la mayor de tres hermanas y me gusta recordar, y dar gracias, a mis padres porque desde muy pequeñas siempre nos concienciaron a que el estudio y el trabajo, que muchas veces supone sacrificio y dificultad, nos permitirá desarrollarnos mejor como personas y profesionales en la sociedad, y siempre han estado allí para ayudarnos cuando lo hemos necesitado.

 

El cambio generacional también importa en la Firmas. ¿Qué os están pidiendo las auditoras más jóvenes?

Las auditoras más jóvenes nos están pidiendo Firmas donde se pueda crecer profesionalmente, que sean innovadoras en tecnología, espacios y tiempos para formación y, por supuesto, conciliación. 

 

¿Qué cambiarías ahora en tu carrera si supieras todo lo que sabes ahora y pudieras volver a empezar?

Si pudiera volver a empezar no dudaría en hacer algo que no hice y es el dedicar unos años a irme a estudiar y/o a trabajar a un país extranjero, porque no me cabe ninguna duda que te enriquece tanto a nivel profesional como a nivel personal.