Son muchas las novedades legislativas que se están aprobando y lo harán en los próximos meses. Leyes que impactan a todas las áreas de su negocio. El ámbito fiscal no está exento y será importante saber si su compañía puede acogerse a algunos de los aplazamientos que en materia tributaria se han promulgado.
Los distintos Reales Decretos y medidas urgentes que se han ido tomando para responder a las consecuencias del COVID-19 suponen cambios de orientación que hacen complejo entender cómo y qué organizaciones pueden realizar o no determinadas actividades.
Las consecuencias regulatorias y legales de la pandemia son cuantiosas y deben considerarse con una visión global que permita analizar su efecto en las compañías para poder anticipar soluciones que contemplen el corto y el largo plazo.
Debe considerar cuáles son las normativas fiscales excepcionales que afectan a su negocio, de manera que pueda aprovechar las obligaciones tributarias canceladas o pospuestas. Asimismo, es importante aplicar los incentivos, créditos y deducciones adecuadas o valorar otras circunstancias de incidencia fiscal.
También tendrán implicaciones fiscales las posibles reestructuraciones financieras, refinanciaciones y concursos. Deberá contabilizar también los créditos tributarios, la deducibilidad de gastos extraordinarias, deteriores, ajustes, provisiones y diferimiento de ingresos.
Tenga en cuenta el impacto fiscal en la reorganización de la actividad empresarial: precios de transferencia, centralización de servicios, nuevos proveedores en nuevos países y en todas sus operaciones de inversión o desinversión.
